La vendimia 2024 ha finalizado con excelentes resultados en términos de calidad de la uva, con un estado sanitario inmejorable en todas las subzonas de la Denominación de Origen. A pesar de haber sido un año marcado por condiciones climáticas difíciles, especialmente por la ausencia de lluvias, los resultados han sido mejores de lo que, en un primer momento, se pensaban. El gran trabajo realizado por los viticultores ha permitido al viñedo aprovechar hasta la última gota de agua, asegurando una producción de mostos suficiente para cubrir sus necesidades y una extraordinaria calidad ante la ausencia de humedades peligrosas en las que desarrollarse enfermedades criptogámicas. Anticipando vinos de extraordinaria calidad.
Excelente calidad en todas las subzonas
Las graduaciones medias de los mostos han alcanzado los niveles esperados según cada subzona, lo que asegura la personalidad única de los vinos: blancos, entre 11 y 12,5 grados, dependiendo de la subzona; tintos, 13,5 grados y moscatel, 12 grados.
La calidad ha sido una constante en todas las variedades, especialmente las autóctonas, lo que refleja el buen manejo de los viñedos y la resiliencia de las vides frente a los desafíos meteorológicos.
Un año de desafíos y superación
Si bien este año ha sido extremadamente seco, con escasas lluvias en primavera, los viticultores han sabido adaptarse a las circunstancias. Las lluvias caídas a finales de agosto y septiembre han sido clave para garantizar la maduración óptima de las uvas y asegurar la salud de las vides para el futuro, permitiendo cerrar el ciclo con éxito en zonas de secano.
Reducción del volumen de producción
La ubicación en secano de la mayor parte del viñedo amparado por DO Valencia hace que las condiciones climáticas hayan tenido un fuerte impacto en la producción.
La merma en el volumen de producción ha sido significativa en comparación con los dos años anteriores. En relación con la cosecha de 2023, la producción total de la DO Valencia ha disminuido un 14%. Las subzonas más afectadas han sido Clariano, con una reducción del 22%, y Alto Turia, que ha visto una merma del 12%. Por su parte, la subzona Valentino/Moscatel ha experimentado una caída más moderada del 4% respecto al año anterior.
En cuanto a la comparación con la cosecha de 2022, la reducción ha sido aún más marcada, con una merma total del 36% en toda la DO. La subzona más afectada ha sido Valentino/Moscatel, que ha sufrido una reducción del 42% respecto a 2022, debido a las duras condiciones climáticas que han afectado gravemente algunas parcelas. En Clariano, la merma ha alcanzado el 32%, mientras que en Alto Turia se ha registrado una disminución más leve, del 2%.
Perspectivas de futuro
La vendimia 2024 deja grandes expectativas para la elaboración de vinos de alta calidad. La excelente materia prima obtenida este año promete vinos con carácter, complejidad y equilibrio, que reflejarán el saber hacer y el esfuerzo de nuestros viticultores.
La calidad de la vendimia 2024 y el esfuerzo del sector por superar los desafíos climáticos ponen en valor las expectativas más optimistas para la nueva añada.