Adentrarse en la subzona del Clariano de la D.O.P. Valencia es como trasladarse a una especie de mar de cultivos de secano, donde la vid tiene un protagonismo muy especial, quizá el público desconozca que además de hacer vinos, también es un lugar de cultivo de patrones, injertos y vivero principal de la mayoría de plantas en todo el territorio nacional.
La Casa de las Vides, situada en un precioso valle denominado la Vall d'Albaida es un ejemplo de los que, siendo viveristas y proveedores de patrones y porta injertos de la vid, han aprovechado las que mejor se adaptan a tierras arcillosas y calizas e incluso a tierras albarizas para sentar un proyecto de elaboración de vinos, cuyo origen se remonta a 1783 y que en 2005 se estableció, dotando a la finca "El Galtero" de una moderna bodega donde elaborar vinos, realizar su crianza y embotellado.
Este valle está en una zona muy fresca, con terrenos pobres en materia orgánica y dónde variedades como la Gewüstraminer, Syrah, Petit Verdot y otras como Garnacha, Cabernet Sauvignon y muchas más, alcanzan su mejor adaptación vegetativa y gracias un proceso de seleciión, la bodega elabora sus mejores vinos.
Visitar la bodega de la finca "El Galtero" es sumergirse en una tradición vinícola de casi tres siglos, los rincones de la bodega antigua nos cuentan como era la elaboración de vinos en la zona y todo ello hoy de la mano de la familia Gandía se ha hecho realidad con un proyecto que les da los mejores frutos.
La moderna bodega, con capacidad para muchos litros de vino, dotada de la tecnología más acorde para estos tiempos recoge los frutos de estas variedades tan bien adaptadas, y no es por ello que sus vinos no tengan carácter mediterráneo, al contrario podemos encontrar variedades como Gewüstraminer en uno de los vinos estrella de la bodega o la adpatación de la Syrah y Petit Verdot en un vino de finca sabroso y completo.
Kik@, Valliblanca, Rosa Rose, La finca 1873, Cvp y Acvlivs son los vinos que se elaboran con diferentes técnicas, tanto en fermentaciones semidulces, como completas y crianzas desde los 4 a los 12 meses, siempre buscando esa frescura y carácter que se consideran para ser diferentes de otros vinos de la misma zona, donde quizá los suelos y variaciones climáticas son tan diferentes de los que se cultivan en esta zona de la Vall d'Albaida.
Recomendable la visita de la mano del enólogo para conocer más a fondo esta bodega, disfrutar de sus rincones, su paisaje y sobre todo de los magníficos vinos que hemos probado.